Styleriser ofrece a las empresas la posibilidad de personalizar la experiencia de sus clientes en sus tiendas virtuales (ecommerce) mediante IA. Han desarrollado un asistente de compra digital que hace recomendaciones a los clientes mediante un análisis facial en tiempo real llamado StyleIQ. Este sistema resalta artículos que combinan con los colores de los compradores y crea "consejos de experiencia" personalizados, en lugar de simplemente suponer lo que podría interesar al cliente.

Esta empresa abre un nuevo mundo de posibilidades en la personalización para el comercio electrónico de moda, ya que la ropa presentada al cliente se verá científicamente mejor en ellos. Los consejos de estilo y color son impulsados por la IA. El proceso es sencillo: los clientes solo necesitan subir una imagen a la tienda online y un estilista virtual analizará los rasgos faciales en tiempo real, recomendando los mejores colores y diseños según las características de la persona.